Conclusiones

Actualmente la cultura digital se concibe como una forma de inversión alternativa para el desarrollo, como una forma de cambio social que va mucho más allá de las formas preestablecidas que se masifica, que se orienta hacia una integración del mundo volviéndose universal.
El Arte Digital tiene más que nada la tarea de redefinir su papel influyente en la cultura frente a la globalización y la integración de una nueva identidad que para algunos representa una amenaza por temor a desplazar lo convencional, mientras que para otros más bien da un nuevo sentido frente a la realidad que vivimos en un marco de internacionalización de las comunicaciones, de un nuevo orden en la organización audiovisual de la cultura en un escenario que justamente rompe los moldes tradicionales.
El arte digital es un escape hacia una nueva dimensión en el arte tradicional que desencadenará quiérase o no en la llegada del arte hacia un mundo nuevo, hacia una nueva era.
Frente a los que sostienen que este arte llevará a la pérdida de identidad o a quienes afirman que por ser algo relativamente nuevo despierta el interés de mucha gente pero una vez que se haya terminado dicho interés irá desapareciendo paulatinamente, creo que el arte digital seguirá evolucionando, pero sin opacar al arte tradicional, que ha sido uno de los puentes principales que sirvió de enlace de los pueblos y civilizaciones a lo largo del tiempo, enriqueció su cultura y además constituye la base de las nuevas formas de arte.

Es interesante destacar la capacidad de proyección social que podría implicar esta nueva herramienta artística si se le diera su justo valor. Un nuevo humanismo en el arte que se acerca al hombre dejándole su espacio al arte convencional, pues ni siquiera físico es...